Para mí, uno de mis sueños a cumplir… hacer el circuito más difícil, extenuante y excitante de Torres del Paine… el gran circuito, la “O”.
Participantes: Montañosa Sarah, Stephanie (hermana de Sarah) y Montañoso Vicho.
PRIMER DÍA:
Todo comenzó con el viaje Talca-Stgo, para tomar el vuelo de las 2:40 am (más barato) sin escalas a Punta Arenas.
La cosa empezó corriendo, porque nos dimos cuenta al bajarnos del talcaparisylondres que estábamos a 5 minutos del último bus al aeropuerto. Atravesamos la calle bajando por el metro y no éramos los únicos esperando, un brasileño y personas de otras nacionalidades también estaban ahí; 1 minuto y pasa el “centropuerto”, JUST IN TIME, como dijeron mis compañeras de viaje.
En el aeropuertoo la espera fue larga; el avión era como la micro de Vilches, en cuanto a comodidad... pero con alas. Por suerte, luego de tres horas llegamos amaneciendo a Puntarenas, bajo el más “rojo y prolongado amanecer que he visto”. Aquí un pequeño detalle, el amanecer es faltando para las 5 de la mañana y con 16 horas de luz en estas fechas de solsticio de verano, se oscurece tipin 11:30 pm, fácil decirlo, pero vivirlo es raro, tu reloj natural cambia!!!.
Legamos a Punta Arenas en medio de unas nubes amenazantes a las 6 de la mañana. El objetivo del día era claro: llegar a puerto natales lo antes posible, para comprar los víveres perecibles y algo de gas requisado en el aeropuerto (si viajan en avión, NADA inflamable puede pasar, a menos que sean pillos :D!!).
Un café a la vena de desayuno y un pan que parecía canapé, en el unico lugar abierto cerca de la plaza y a buscar buses Pta Arenas – Pto Natales se ha dicho. Buses Pacheco fue el servicio contratado y a las 8:30 am ya estábamos rumbo a Natales (3 hrs mas de viaje) ahora un poco mas cómodos que en el avión, pudimos pegarnos un pestañón.
Llegamos a Natales y directo a Dumestre, la residencial que nos recomendó Carlos, comoda, barata, un buen desayuno y una atención de llegar a tu propia casa. Nos inscribimos, a conocer, comprar y comer… el canapé nos había quedado solo en la muela.
Un rico bistoco a lo pobre recomendado por don Ruben, compramos lo que “supuestamente nos faltaba” conjeturando que todos comíamos normal, poquito y mucho (según el orden de los participantes), ERROR GARRAFAL!!.
Stepanie, se tienta con un softshield y lo compra… le sirvió una enormidad para los 8 siguientes días que tuvimos de todo, sol, lluvia, algo de nieve, mucho, pero mucho viento y por supuesto frio.
Todo listo, a ordenar, pero sin antes probar unos milcaos, panes de papa y sopaipillas sureñas (raras, pero buenas) que hace el vecino del hostal.
SEGUNDO DIA: 29 de diciembre del pasado año
La pampa se abrió antes nuestros ojos, pasando por diferentes estancias y lagos, los dos mas conocidos y grandes el Toro y Sarmiento. Al llegar a Cerro Castillo (10 min. de parada) nos pasó lo que les pasa a los “padahuanes” (o novatos en el tema), como no hay ni un solo árbol y estas calentito dentro del bus, tu dices que rico y calido es el clima aquí… pero saliendo del bus tuvimos que volver de un salto por nuestras casacas. Estaba muy helado por ese viento de los mil demonios que nunca para. Ahí también entendí la forma de los paraderos de micro, muy característicos de la zona, completamente cerrados y con vidrios por todos lados para esperar con la mejor vista.
En la última parte nada que envidiar al viaje a vilches, los buses se llenaron de polvo… aunque eso solo lo noté en la ida. En la vuelta veníamos tan cochinos y habíamos comido tanta tierra que ni lo notamos!!
En el camino vimos una gran manada de guanacos, el alimento por muchos años de los Onas o Selk’nam, eran bastante rápidos al igual que la familia de Ñandús en el costado de una reja.
El programa propuesto por la cordada era bajarnos en laguna amarga y tomar un transfer hasta las torres, subiendo por el día sin peso al mirador de las torres (cosa que la mayoría hace cuando el tiempo es bueno), pero como ya habíamos notado en el camino, la cosa estaba tapada y nos arriesgaríamos a la suerte del último día tomando serón como 1º objetivo.
Ya con la decisión tomada, comenzamos a caminar los
Llegamos a las 17 hrs. a Serón, que es el primer campamento pagado, con duchas de agua caliente desayunos, almuerzos, el “dueño de de fundo” excelente recepcionista y simpático, te esperaba con agua hirviendo, por lo que no tenia ni que prender cocinillas. Un siete para el campamento.
A cocinar puré de papas con “tunas” (atun), sopa y al sobre.
2 comentarios:
UFFFFFF!!!!!!!!!! que wena , es un viaje que todos sin lugar a dudas debieramos vivir, el paisaje simplemente expectacular.
Muchas felicidades por la tremenda vivencia, espero los relatos de los otros dias, y poder compartir junto a ustedes lo antes posible.
Un abrazo gigante a los expedicionarios, en especial amis amigos Sarah y Vicho.
Julio César.
Muy entretenido relato. Facil de entender y por cierto "apacionante"
Y...... que más pasó.... Estoy ancioso.
Luis(ex montañista)
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